Así es el título del libro de Italo Calvino.
10 inicios de 10 novelas totalmente diferentes, todas inconclusas, y una historia paralela dónde tú, lector, eres el personaje principal.
Intentando explicar la estructura de la novela de una forma simple, tendría que exponer que es como un juego de cartas barajeadas e insertadas a otro juego de cartas ajeno. Se confunden, son de distintos paquetes, pero se puede jugar el mismo juego de poker.
Al leerlo por primera vez, lo hice de una forma lineal, de la página 1 a la 267, pasando de largo la advertencia del escritor, (es tu libro, tú lo compraste, haz lo que desees con él) y me fui dando cuenta que podía leerlo de maneras distintas, comenzar de cualquiera de los 10 inicios de novelas y decidir... y comenzar... navegar... leerlo como deseara.
En la estructura de narración te va dando claves, códigos, pistas, para aprender a jugar con el libro, te invita a pensar leerlo diferente, una característica, creo yo, del hipertexto.
Lo interesante al releerlo es divertirte, sentirte el escritor, el personaje, el amante, el viajero, el niño, la oveja, y si te cansas, ser alguien más, para eso, en una noche de invierno, me puedo, te puedes, convertir en un viajero.
10 inicios de 10 novelas totalmente diferentes, todas inconclusas, y una historia paralela dónde tú, lector, eres el personaje principal.
Intentando explicar la estructura de la novela de una forma simple, tendría que exponer que es como un juego de cartas barajeadas e insertadas a otro juego de cartas ajeno. Se confunden, son de distintos paquetes, pero se puede jugar el mismo juego de poker.
Al leerlo por primera vez, lo hice de una forma lineal, de la página 1 a la 267, pasando de largo la advertencia del escritor, (es tu libro, tú lo compraste, haz lo que desees con él) y me fui dando cuenta que podía leerlo de maneras distintas, comenzar de cualquiera de los 10 inicios de novelas y decidir... y comenzar... navegar... leerlo como deseara.
En la estructura de narración te va dando claves, códigos, pistas, para aprender a jugar con el libro, te invita a pensar leerlo diferente, una característica, creo yo, del hipertexto.
Lo interesante al releerlo es divertirte, sentirte el escritor, el personaje, el amante, el viajero, el niño, la oveja, y si te cansas, ser alguien más, para eso, en una noche de invierno, me puedo, te puedes, convertir en un viajero.
5 comentarios:
Sería interesante saber a definición de hipertexto, os seus rasgos, as súas potencialidades, os seus problemas, os cambios que supón no relato, sexa de ficción ou non e despois imbricar eses rasgos coa esencia da novela de Italo Calvino, para establecer similitudes e diferencias, para poder interpretar as liñas mestras da narración hipertextual.
Hai que ampliar a análise e cos mesmos parámetros incorporar a revisión da película.
mol
¿Cómo se vencella a proposta de Italo Calvino coa de Cortázar en Rayuela?
¿todo está relacionado?
¿de qué modo se establecen esas relacións?
¿camiñamos cara un arte total?
¿Cales son os roles na cadena de comunicación nesta narrativa e na hipertextual?
mol
La propuesta de Cortázar es diferente a la de Italo Calvino. Esta segunda es de naturaleza mucho más coherente con la deconstrucción de la linealidad del sentido narrativo que la de Rayuela, que sólo deconstruye la linealidad del sentido de la lectura.
Lo más curioso es que el contenido narrativo de Rayuela es muy disperso, poco pragmático. Hay capítulos que sólo consisten en la cita de un libro, capítulos que interrumpen la narración de la historia de su anterior y de su consecutivo, etc. Quiere decirse que se da una paradoja curiosa; mientras que rompiendo el sentido de la lectura mantiene Rayuela la secuencialidad de sus capítulos, a nivel de contenido genera una maraña caótica que sí se parece mucho al hipertexto.
La propuesta de Cortázar es diferente a la de Italo Calvino. Esta segunda es de naturaleza mucho más coherente con la deconstrucción de la linealidad del sentido narrativo que la de Rayuela, que sólo deconstruye la linealidad del sentido de la lectura.
Lo más curioso es que el contenido narrativo de Rayuela es muy disperso, poco pragmático. Hay capítulos que sólo consisten en la cita de un libro, capítulos que interrumpen la narración de la historia de su anterior y de su consecutivo, etc. Quiere decirse que se da una paradoja curiosa; mientras que rompiendo el sentido de la lectura mantiene Rayuela la secuencialidad de sus capítulos, a nivel de contenido genera una maraña caótica que sí se parece mucho al hipertexto.
El lector es el personaje. Eso es fantástico porque es una de las características del hipertexto y aquí se cumple. Haz lo que deseas con el libro, dice el autor. O sea que podemos leerlo como queramos. Es una invitación. Es la decisión de uno, pero sólo puedes jugar con ese par de juegos de cartas. Y eso te limita. El lector no es creador, pero le puede dar el sentido que quiera al libro y puede atrapar una identidad diferente a la suya, pero con las características marcadas por el autor primero.
"Te invita a pensar leerlo diferente" y "sentirse escritor" son dos características marcadas por el autor del blog tras la lectura del libro que nos acerca al hipertexto. Pero yo creo que el lector tiene que ser además autor, no sólo el que toma una decisión sobre un juego cerrado y con reglas, que son los propios textos creados por el autor primero.
Publicar un comentario